Es la vía más económica de aprovisionamiento de gas natural al sur de Europa

Es la vía más económica porque es una ruta directa, con el trazado más corto. Por tanto, se minimiza el gasto de energía a la hora de transportar el gas y se evita el canon de tránsito que supone el paso por terceros países.

Además, no necesita de un proceso de licuación y su transporte y almacenamiento son más baratos que en el caso del GNL.